Todos tenemos un estilo, pero a veces las personas lo confunden con el buen gusto. El estilo es como expresamos nuestra personalidad a través de nuestra vestimenta, este se desarrolla desde que somos niños. Los estilos tienen que ver también con las profesiones que tenemos y la forma en la que nos desenvolvemos y expresamos con los demás, nos explicó en entrevista David Navarro experto en la creación y proyección de la imagen pública.
Generalmente todos tenemos dos estilos, en el que uno predomina. Para saber cuál es el nuestro debemos de conocernos a nosotras mismas y fijarnos en lo que buscamos a la hora de elegir la ropa. Si tú aún no has notado cuál es tu estilo, David Navarro nos dio algunas claves para que sepas cuál es el que te caracteriza y aprendas a sacarle provecho.
Los diferentes estilos
* Estilo natural: Son aquellas mujeres a las que les gusta estar sin complicaciones y cómodas. El riesgo es caer en las fachas. Muchas veces las personas que tienen un estilo natural se dedican a las ventas, a la arquitectura o a los deportes.
* Estilo tradicional: Busacan la sobriedad, combinan muy pocos colores entre si, blanco, negro azul, etc. Invierten menos en actualizar su guardarropa, aunque las prendas son de buena calidad. El riesgo es parecer anticuado. Las personas con este estilo suelen ser contadores públicos, economistas, políticos o administradores.
* Estilo creativo: No les gusta parecerse a nadie, combinan texturas, cuadros rayas, combinación de muchos colores. El riesgo es que entre tanta combinación diferente puede llegar a ser ridículo. Suelen tener profesiones como estilistas, maquillistas, publicistas, mercadólogos, artistas y diseñadores gráficos.
* Estilo seductor: Les gusta marcar la figura con ropa pegadita, les gusta atraer al sexo opuesto y suelen ser mujeres muy seguras. El riesgo es que pueden caer en lo vulgar. Profesionalmente comúnmente son propietarios de gimnasios, actores, cantantes, o tienen alguna profesión en la que el cuerpo es parte importante.
*Estilo romántico: Es el tipo de mujer al que le gusta estar bien combinada, no usa combinaciones muy atrevidas. Le gustan los colores claros, no se viste casi nunca de negro, le gustan los colores tiernos, como los tonos pastel y los encajes. El riesgo es que puede llegar a parecer demasiado cursi con las combinaciones de flores, moños y encaje, por ejemplo. Comúnmente este tipo de gente tiene profesiones con mayor calidez, como médicos, miembros de alguna organización religiosa o psicólogos.
* Estilo dramático: Buscan impresionar, por medio de altos contrastes y accesorios grandes, y con el uso de colores llamativos como rojo con blanco o negro, para pasar inadvertidas. El riesgo es que pueden llegar a intimidar, al mostrarse con tantos colores penetrantes. Suelen ser personalidades públicas, empresarios, consultores de imagen, estilistas, maquillistas o comunicadores.
* Estilo elegante: Personas que en todo momento proyectan estatus, cultura, hasta en su lenguaje corporal provoca admiración porque es como una guía. Ser elegante es saber vestir de acuerdo al clima, a con quien estás y a las circunstancias. Este tipo de personas desde niñas cuidan muchos los detalles, como hábito. El riesgo es parecer ostentosa. Suele destacarse directores de empresa, personalidades públicas o políticos.
¿De qué me sirve conocer mi estilo?
De acuerdo con el experto, al conocer nuestro estilo podemos ser más congruentes con nuestra forma de vestir y actuar, para que la gente pueda percibir a una personas autentica y sin poses, que le saca provecho a sus características naturales.
Si no nos gusta tanto nuestro estilo natural, podemos aprender a modificarlo para bien, pero para eso es necesario que nos conozcamos. “Todos los estilos cuando llegan a su implementación ideal tienen fortalezas” aseguró el Director General de Imagen Excellence.
Además hay que tener en cuenta que ninguno de los estilos es más importante que otro y que todos pueden combinarse. “Se necesita disciplina para poder tener un estilo congruente y trabajar en la imagen que quieres proyectar de acuerdo con tu personalidad” recomendó David Navarro
“El estilo debe de ser una de las principales herramientas para que la mujer se exprese correctamente, no es recomendable disfrazarnos de un estilo que no es el nuestro, hay que adaptar nuestra personalidad a cada estilo”.
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